A un año del ingreso de Nutrisco a su propiedad, Valle Frío, empresa enfocada en la producción y exportación de berries y otras frutas congeladas, ha tenido un promisorio desempeño, con ventas que, se proyecta, llegarán a cerca de US$ 80 millones este año. En el período, la compañía conceptualizó su propósito de crear bienestar generando alimentos seguros e innovadores desde el campo hacia el mundo.
Imaginemos a una persona que vive en Los Ángeles, Chicago o Nueva York. Está preocupada por la calidad de los nutrientes que consume día a día e incorpora frutas a su dieta, como berries, los cuales prefiere en formato de smoothie. Luego, toma su auto y conduce hasta alguno de los supermercados más conocidos de Estados Unidos; puede ser Walmart o Costco. Estaciona, saca un carro y va a la sección de fruta congelada. La toma y esta persona, que también podría estar en Seúl o Tokio, se va a su casa y se prepara para consumir un alimento saludable, seguro, delicioso y que proviene directamente del campo. Lo que probablemente no sabe es que el producto que compró es chileno y que su productor es el líder del país en exportación de fruta congelada a Estados Unidos, el principal mercado de este sector.
Fue hace cuatro décadas que el visionario empresario Juan Sebastián Moreno comenzó a adentrarse en el mundo de la fruta congelada. En ese entonces, producía un contenedor de frambuesa congelada al año. Hoy, la cifra asciende anualmente a más de mil contenedores, siempre con los berries como protagonistas, pero también con otras frutas importadas, como piñas, mangos, dátiles, cacao y dragon fruit, entre otras. Sus principales plantas están en Curicó y Angol. Al respecto, José Pedro Moreno, gerente general de Valle Frío, comenta: “Ofrecemos una solución para la categoría de fruta congelada amplia e innovadora, con un especial foco en la inocuidad de los productos. Estamos integrados desde el campo, lo que es muy importante, y lo que ofrecemos es llegar al consumidor final en cualquier parte del mundo con un producto chileno de alto valor agregado”.
Desde julio del año pasado, la compañía cuenta con una infusión de capital que ya se ha notado en sus resultados: en esa fecha, Orizon entró en la propiedad de Valle Frío, y hoy, a consecuencia de la posterior división de Orizon, Nutrisco -filial de Empresas Copec-, es propietaria del 65% de las acciones de Valle Frío. A poco más de un año de este hito, Moreno afirma que el cambio ha sido muy positivo: “La gracia que tiene el grupo empresarial es que aporta mucho, pero a la vez nos ha permitido seguir trabajando de la forma en la que veníamos. Eso también reconoce que lo que hacíamos estaba bien». Las cifras hablan por sí solas: el año 2021 vendieron US$ 33 millones; el 2022, US$ 55 millones y, para el cierre de 2023, están esperando entre US$ 75 y 80 millones. Las proyecciones para 2024 son cercanas a US$ 100 millones en ventas. “Cuando hicimos el modelo económico para presentarlo al grupo, sabíamos hacia dónde podíamos ir teniendo un socio con mejores espaldas y que también nos ayudara en todo el tema operativo. Si bien comercialmente estamos muy bien y en la parte productiva también, necesitábamos, para el crecimiento, continuar mejorando prácticas, y contar con apoyo en materias de sostenibilidad e inversiones, entre otros”, explica.
Coincide con esa mirada Rigoberto Rojo, gerente general de Nutrisco, quien señala que Valle Frío se vio impactado positivamente al tener a su lado a un socio más grande, que contaba con amplias capacidades en ámbitos como el financiero, operacional, comercial o de gobierno corporativo: “Un respaldo que no es solo económico, sino que de sentirte con la capacidad de tomar nuevos contratos o hacer compras más grandes. Esto refuerza la confianza de los clientes, que reciben un servicio óptimo», dice.
José Pedro, por su parte, destaca que han experimentado una maduración interna, la que se ha visto potenciada con el vínculo a un grupo sólido, con un proyecto a largo plazo, que les permite entrar a una categoría de alimentos saludables con mirada de futuro.
El mundo a la mano
¿Qué vio Nutrisco en Valle Frío? Rigoberto Rojo señala, en primer lugar, que tenían una propuesta de valor diferenciadora e innovadora. Además, que contaban con potencial exportador, de la mano del formato congelado, que hoy es tendencia en el mundo. Un tercer factor que resalta es que su negocio se concentraba en un sector definido como estratégico por Nutrisco: la fruta congelada. En cuanto a la participación de mercado, había aún mucho espacio para desarrollarse, tanto en Chile como en Estados Unidos y Asia, apalancados en la calidad de los productos. “Lo otro que nos pareció muy interesante eran los socios, una familia tradicional del mundo de la agricultura, con buena capacidad de gestión; gente trabajadora, con visión de largo plazo, con intereses alineados con los que tiene Empresas Copec y Nutrisco respecto de la forma de hacer negocios, con empeño en seguir invirtiendo”, subraya el ingeniero civil industrial.
Efectivamente, José Pedro Moreno explica que los planes para el futuro se han visto reforzados tras el arribo de Nutrisco. La idea es poder ampliar su foco internacional y aumentar la participación en Asia, pues hoy Estados Unidos representa más del 80% de sus exportaciones. En cuanto al mercado local, donde la venta representa cerca del 3%, el objetivo es crecer por lo menos entre un 30% y un 40% en 2024. “Además, este año se materializó una inversión de US$ 8 millones, lo que nos permitió crecer un 50% en la capacidad productiva. En almacenaje de fruta, en tanto, se incrementó la capacidad en un 35%, con una cámara nueva de 3.600 posiciones”, afirma el ejecutivo.
Empresas con propósito
Definir un propósito es clave para una compañía, pues se conceptualiza aquello que motiva su existencia y resume lo que la organización y quienes trabajan en ella desean lograr para su bienestar y el de otros.
Durante 2023, tanto Nutrisco como Valle Frío definieron sus propósitos. En el caso de la primera, este se sintetiza en la frase “Better food, better future”; la segunda, en tanto, lo declaró como “Creamos bienestar generando alimentos seguros e innovadores desde el campo hacia el mundo”. Ambos convergen en conceptos como la innovación y la mejora continua. “Nosotros vendemos productos que son para consumo final. Cada bolsa va a ser consumida por una familia, y son productos terminados, por lo que deben ser inocuos: que no tengan ningún problema, que cualquier persona sea capaz de abrir esa bolsa y comérselos; que sea fruta sana. Para nosotros es muy importante que lo que vendemos sea un alimento seguro y de alto valor agregado”, dice José Pedro al profundizar en el propósito de Valle Frío, el que, si bien fue redactado este año, ha estado siempre implícito a lo largo del tiempo.
Rigoberto Rojo, por su parte, señala que la sección “Better food” del propósito de Nutrisco alude a la decisión de siempre optimizar los alimentos: “Es una búsqueda permanente, mediante la innovación, de mejorar la industria alimentaria. Nuestro principal desafío es desarrollar mejores productos que los que hoy existen”. El “better future”, en tanto, tiene un doble componente: por un lado, el de facilitar una mejor calidad de vida a las personas gracias a los atributos de los alimentos. A nivel más general, en tanto, alude a una forma de hacer negocios alineada a los principios ASG (ambiental, social y gobernanza).
Al reflexionar sobre los desafíos de mediano y largo plazo, Rojo, quien preside el directorio de Valle Frío, puntualiza que los focos son incrementar la participación y capacidad de gestión: “Puede crecer mucho todavía, y no tengo dudas de que lo vamos a lograr, haciendo las cosas con calma, con control, con calidad y preocupándonos siempre por el servicio a los clientes. El futuro es prometedor; es un mercado grande, donde Chile tiene una participación menor en Estados Unidos, con un producto diferenciado y de valor agregado, con amplia cobertura en supermercados. Pero básicamente se hacen las cosas bien, principalmente en inocuidad, calidad e innovación en el mundo de los mix de frutas, además de los monoproductos”. Por su parte, José Pedro Moreno destaca que Valle Frío mantiene su identidad como empresa familiar, muy cercana a la gente, “pero con todo el upgrade que le ha dado estar inserta en este grupo, el que ha sido súper flexible en mantener esa identidad de empresa familiar, de la zona, cercana a la gente”.