Los últimos resultados entregados indican, a junio del presente año, un Ebitda de MMUS$ 1.612 y una utilidad de MMUS$ 516. Son cifras que representan incrementos sustantivos respecto de las comparables del año pasado, con alzas de 54% y 141%, respectivamente.
La mejora responde fundamentalmente al negocio de la celulosa, en que se han registrado precios en niveles favorables durante la primera parte del 2024, muy superiores a los del año pasado. En un negocio cíclico por naturaleza, como todos los commodities, se debe convivir con esta volatilidad y hacer todos los esfuerzos por producir de la manera más eficiente posible. Junto con ello, la Línea 3 de Arauco, resultante del proyecto MAPA, ha venido incrementando su producción y alcanzando su capacidad de diseño, aumentando así los volúmenes y disminuyendo sus costos unitarios.
En la división de paneles y maderas, los resultados se han ido ajustando a niveles cercanos a los promedios históricos, tras dos años en que las tendencias de construcción y remodelación generaron cifras excepcionales. Se trata de un negocio relativamente estable, con atractivos drivers de largo plazo, donde la filial Arauco tiene una balanceada exposición a distintas geografías.
En el sector energía se aprecian mayores Ebitdas, provenientes de mejoras de márgenes en combustibles líquidos, incluyendo los del canal industrial, con efectos de revalorización de inventarios más favorables y con un destacado rendimiento del segmento de lubricantes en todas las geografías. Abastible, por su parte, muestra también mejores resultados, impulsados por volúmenes crecientes, en el contexto de una acertada estrategia comercial y una sólida posición de abastecimiento.
En Perú, Marcobre sigue logrando resultados interesantes, aunque menores a los del año pasado, por encontrarse operando este año en una zona de menor ley de cobre, de acuerdo a su plan minero.
Esta mayor generación de Ebitda ha permitido ir mejorando gradualmente las métricas de endeudamiento, alcanzando a junio del presente ejercicio un ratio DFN/Ebitda de 3,0, nivel que permite cumplir holgadamente nuestra política financiera, donde hemos establecido rangos objetivos que están en línea con una clasificación investment grade, que ha sido ratificada recientemente para Empresas Copec por las agencias clasificadoras de riesgo, con una perspectiva estable. De esta forma, mantenemos una estructura financiera prudente y resiliente, buscando al mismo tiempo financiar proyectos atractivos y rentables y distribuir dividendos de manera estable. Así lo han reconocido los mercados financieros, que le permitieron a la Compañía la colocación de bonos locales con los spreads corporativos más bajos del año.
En esta misma línea, Arauco acaba de concretar la venta de activos forestales por casi US$1.200 millones en Brasil, con un efecto en resultados (a reflejar en el tercer trimestre) de más de US$ 170 millones y un ingreso de caja de más de US$ 900 millones. En otra escala, aunque con la misma filosofía de buscar el «mejor dueño» para los activos y aspirar a generar valor permanentemente, Terpel acordó la venta de sus operaciones de estaciones de servicio en Ecuador y Perú, mercados donde no tenía una presencia importante ni posibilidades evidentes de crecimiento. Todo ello permite a la Compañía robustecer aún más su balance, con miras al crecimiento que podría venir prontamente.
Y es que Arauco sigue avanzando en sentar las bases para su potencial proyecto Sucuriú, habiendo ya asegurado más del 70% de las hectáreas necesarias para abastecer su futura planta de celulosa, y aprobado trabajos preliminares. En el último trimestre de este año se debieran tomar definiciones definitivas sobre este proyecto, que permitiría a Arauco aumentar su capacidad de celulosa en 50%, generando al mismo tiempo un enorme impacto ambiental positivo.
Copec, por su parte, sigue adelante con su estrategia de impulsar la transición energética, con un nuevo acuerdo para un sistema BESS de almacenamiento eléctrico en el norte de Chile, que permitirá a los activos de su Granja Solar una inyección de electricidad permanente y de alta potencia.
También en la línea de la transición energética, Abastible acaba de anunciar un acuerdo para adquirir, sujeto a algunas aprobaciones de las autoridades competentes, la división de gas licuado de la española Cepsa, con operaciones en España y Portugal. Es para la filial una operación con un retorno atractivo, especialmente si se le ajusta por riesgo. A la vez, le permite tener exposición a un mercado que está varios años más avanzado que los latinoamericanos en transición energética, lo que trae beneficios en términos de aprendizaje, desarrollo de capacidades y productos, potenciales alianzas y otros.
Así, Empresas Copec avanza en distintos frentes, progresando en su tarea de ir configurando un mundo más sostenible, con visión de largo plazo y con la mirada puesta en las futuras generaciones.