El ambicioso proyecto de regeneración ambiental y urbana, emplazado en Viña del Mar, hoy está siendo reconocido internacionalmente como un referente en la recuperación de suelos degradados.
A través de Remedia Green Tech, Las Salinas genera conocimiento para ayudar a otras empresas a tomar las decisiones correctas en materia de remediación y prevención.
Día a día, cientos de viñamarinos y turistas pasan frente a lo que antaño fuera un fallido proyecto de extracción de sal, una fábrica de ladrillos, una cantera y el sitio de operación de diversas empresas, incluidas las petroleras. Este último uso es tal vez el más conocido y el que todavía permanece en la retina de muchos. En efecto, este terreno, que mira al mar en el sector norte de la ciudad, fue un ícono de la industria de los combustibles durante prácticamente todo el siglo XX.
Hoy, el paño completo del sector conocido como Las Salinas es escenario de un ambicioso proyecto de regeneración ambiental y urbana. Lo que no todos saben es que esta iniciativa dará otro rostro a la Ciudad Jardín y la situará como ejemplo internacional de la recuperación de espacios vitales para mejorar la calidad de vida de sus habitantes.

Un lugar vivo
Esta nueva parte de la historia comenzó en 2001, cuando la Municipalidad de Viña del Mar firmó un acuerdo con las petroleras para terminar con la utilización industrial del sitio, dado el crecimiento de la ciudad y la necesidad de privilegiar actividades asociadas al turismo y al medioambiente. Esto incluía eliminar restos de hidrocarburos y otros contaminantes, y dejarlo en condiciones que no representaran riesgo para las personas ni para el entorno.
Entre 2009 y 2013 se hizo una primera remediación, que implicó intervenir el primer metro de suelo para botar estanques, sacar infraestructura y remover tierra.

Ricardo Labarca, su gerente general, explica que todo tiene su génesis en la trayectoria de Copec en ese sector de la ciudad y en su relación virtuosa con ella. “La compañía tiene una convicción que nace desde la esencia del Grupo y es consistente con la forma en que mira las cosas: hacerse cargo de soluciones sostenibles, que agreguen valor y traigan beneficio para la comunidad y las empresas”.
Así, el foco fue puesto en la implementación de un proyecto de desarrollo urbano que combine vivienda, áreas verdes, espacios para cultura, deporte y comercio, con base en la identidad de Viña del Mar e integrando diversos usos para todos quienes viven, trabajan y visitan la ciudad. “Se trata de crear un lugar vivo permanentemente, que potencie la economía local y la vida en comunidad, todo con una mirada a escala humana, generando una nueva centralidad en la comuna”, detalla el gerente general de Las Salinas.
Naturaleza, comunidad y desarrollo
A partir de la consolidación del paño de 16 hectáreas, el trabajo no ha cesado. Labarca cuenta que han sido años de esfuerzos intensos para lograr la aprobación del proyecto de remediación, “en un contexto de poco conocimiento a nivel país sobre este concepto, escasa experiencia y prácticamente nula normativa. Pero el respaldo de un grupo empresarial que cree en la importancia estratégica de la iniciativa nos permitió demostrar su solidez técnica.”
La intervención es de tal magnitud que debe hacerse por etapas. Por ello, el terreno fue dividido en dos grandes porciones. “Hoy estamos ejecutando la primera, que a su vez tiene dos entregas: una este año y la otra a fines de 2027. La segunda porción debería estar lista en 2030”. Los avances son visibles, con la remediación en régimen “para ir acercándonos a la entrega en los plazos previstos”, precisa Labarca.

Próximamente se concretarán definiciones de elementos urbanos específicos y conversaciones con las empresas que liderarán esas implementaciones. El gerente general de Las Salinas adelanta que “estamos invitando a desarrolladores a sumarse, pero nosotros nos quedaremos participando en esas sociedades para asegurarnos de que lo que prometimos se cumpla”.
La participación ciudadana ha sido un eje fundamental desde el inicio del proyecto y ha permitido mejorar la propuesta para cumplir con las expectativas de distintos grupos de interés. “Hemos sostenido muchas reuniones y habilitado plataformas de consulta, en un trabajo dirigido a levantar los anhelos y preocupaciones, y alinearnos para seguir aportando valor a la ciudad”, enfatiza Labarca.
La propuesta busca equilibrar naturaleza, comunidad y desarrollo. Edificaciones de alturas medias y vistas despejadas, seguridad y tranquilidad, conexión con el transporte público y facilidades para los peatones, presencia de flora nativa y un parque central que une el borde costero con la vida del barrio son solo algunos de los elementos y criterios que priman en la planificación. Esta contempla la instalación de hoteles, oficinas, un centro de convenciones, comercio y equipamiento urbano de primera categoría para vivir, trabajar y disfrutar en un espacio único.
Remedia Green Tech: generando conocimiento

La remediación es el proceso de limpiar y restaurar los suelos contaminados para sanearlos y reintegrarlos al ecosistema. Con esa misión nació Remedia Green Tech (Remedia GT), filial de Las Salinas que se hizo cargo de la transformación de un pasivo ambiental en una oportunidad de desarrollo sostenible. En este caso, se está realizando a través de la biorremediación, técnica que utiliza microorganismos o bacterias para absorber los hidrocarburos, generando así un área libre de riesgo para las personas y el entorno.
Stephanie Rotella, gerenta de Medioambiente de Las Salinas, lidera el equipo responsable de la recuperación del terreno en que se emplaza el proyecto urbano. Ella comenta c��mo Remedia GT tomó forma y hoy asesora a distintas empresas a lo largo de Chile, que tienen suelos degradados y requieren integrarlos nuevamente al tejido urbano.
“Por la impecabilidad, la multidimensionalidad, el relacionamiento comunitario y el desafío de estar en medio de la ciudad, Las Salinas se fue convirtiendo en un referente en desafíos medioambientales”, relata.


“Entonces, detectamos la oportunidad de generar conocimiento para ayudar a otras compañías, poniendo a disposición nuestra experiencia como pioneros en estas temáticas”.
Complementa la idea el gerente de Desarrollo, Carlos Correa, señalando que se detectó una necesidad entre los propietarios de terrenos mineros e industriales, que carecían de las herramientas para tomar decisiones adecuadas tanto de recuperación como de prevención de daños futuros. “Remedia GT pasó del diagnóstico a la acción, proponiendo formas concretas de abordar los retos medioambientales y aportando una mirada de largo plazo, basada en las mejores prácticas mundiales”.

Actualmente, la filial trabaja en desarrollar la “inteligencia ambiental”, que Stephanie Rottela y Carlos Correa definen como “conectar bases de datos de puntos potencialmente contaminados y cruzarlas con información de acuíferos, asentamientos humanos, posibles contaminantes de los terrenos, rutas y otras variables, que permitan hacer clasificaciones según su relevancia y aplicar medidas de remediación”.
Las industrias tienen un creciente interés por hacer las cosas mejor y Remedia GT las acompaña en ese camino, con experiencia, conocimiento y metodología que las ayude a reaccionar de manera diligente, rápida y eficaz. Y también con la convicción de estar cambiando paradigmas para forjar un futuro mejor.
Un referente internacional
El proyecto fue seleccionado como el único representante chileno para exponer su experiencia en la versión 2025 del encuentro AquaConSoil, realizado en junio en la Universidad de Liège, en Bélgica.
AquaConSoil es uno de los eventos más importantes del mundo en materia de gestión sostenible del suelo, aguas subterráneas y regeneración ambiental en entornos urbanos. Desde su inicio en 1985, se ha convertido en una plataforma líder que reúne a científicos, responsables políticos y representantes de la industria para compartir conocimientos y fomentar la colaboración interdisciplinaria. Con más de 240 expositores en su reciente versión, AquaConSoil destacó por su alto nivel técnico y científico, así como por la presencia de instituciones, investigadores y proyectos pioneros en soluciones basadas en la naturaleza, remediación ambiental y desarrollo sostenible.

El expositor que representó a Las Salinas fue su gerente general, Ricardo Labarca, quien lideró el conversatorio “Successful legacy site revitalization, governance, risk mitigation and circular solutions” (Revitalización exitosa de sitios patrimoniales, gobernanza, mitigación de riesgos y soluciones circulares). Además de la presentación sobre la experiencia de Las Salinas en el proceso de saneamiento y regeneración urbana del proyecto en Viña del Mar, el equipo nacional sostuvo una serie de reuniones y visitas con quienes gestionan casos exitosos en la materia, buscando profundizar el conocimiento y experiencias que aporten al proyecto en favor del desarrollo ambiental y urbano de la ciudad jardín.
Para el ejecutivo, la participación de Las Salinas en un foro de alto nivel mundial como AquaConSoil, constituye “un reconocimiento al trabajo que estamos desarrollando en Viña del Mar. Además, continúa posicionando al proyecto como un referente latinoamericano en la recuperación responsable de suelos urbanos, abriendo oportunidades de colaboración internacional y validación técnica en una plataforma de primer nivel”.
Stephanie Rotella, gerenta de Medioambiente, señaló que “nos llena de orgullo participar por segundo año consecutivo como expositores en una instancia internacional tan relevante para la gestión sostenible de recursos como el suelo. Al mismo tiempo, nos sentimos muy desafiados por el reconocimiento que significa la elección de ser el único proyecto chileno presente, pues es una oportunidad que nos permite aprender de grandes ejemplos internacionales y nos insta a la mejora continua de nuestros procesos”.