El EBITDA consolidado y la utilidad de Empresas Copec acumulados a junio de 2025, alcanzan, respectivamente, los US$ 1.489 millones y los US$ 437 millones.

El reciente trimestre reflejó una dinámica mixta en los negocios de Empresas Copec, en un contexto internacional desafiante y marcado por volatilidades sectoriales. El Ebitda consolidado se ubicó levemente por debajo del trimestre anterior y del mismo período del año pasado, resultado que responde principalmente al comportamiento de la celulosa, mientras otras divisiones mostraron signos de solidez y continuidad.
En el negocio forestal, Arauco enfrentó un entorno de precios bajos en celulosa, contexto que se intensificó tras el anuncio de aranceles por parte del gobierno de Estados Unidos, generando una pausa en la demanda, con compradores cautelosos que aguardan una reducción de las incertidumbres que este tema ha producido. Esta situación se tradujo en una caída del Ebitda total de la compañía respecto del año anterior. En contraste, la división de Maderas mantuvo su estabilidad, con cifras alineadas con los promedios históricos, reafirmando la resiliencia de este segmento.
El sector energía, en tanto, continúa siendo un motor relevante de crecimiento. La filial Copec presentó un incremento en su Ebitda respecto de 2024, impulsado por un aumento significativo en volúmenes en sus distintos canales. Terpel mantuvo su buen desempeño, con un aporte destacado del negocio de lubricantes. Abastible mostró una evolución comercial favorable en todas sus geografías, acompañada de eficiencias logísticas relevantes. Particularmente notable ha sido el desempeño de Gasib, en España, cuya incorporación reciente ha superado las expectativas iniciales, consolidando una apuesta estratégica por la internacionalización.
En minería, Marcobre sigue mostrando una operación sólida, con costos competitivos derivados de buenas leyes y presencia de subproductos, en un entorno de precios favorable para el cobre. Este desempeño reafirma el valor estratégico de la presencia de Empresas Copec en sectores clave.
Uno de los hitos más relevantes del período ha sido el avance del proyecto Sucuriú, el más ambicioso en la historia de la filial Arauco. Si bien su ejecución representa un desafío considerable en términos de recursos, la solidez financiera de la Compañía ha sido determinante para su aprobación. Empresas Copec ha mantenido históricamente una política de prudencia financiera, con límites claros de endeudamiento y acciones concretas ante escenarios más ajustados. Esta disciplina ha sido reconocida por los mercados, como lo demuestra la exitosa colocación de un bono corporativo, que registró una demanda muy superior al monto ofertado y uno de los spreads corporativos más bajos del año. En esta misma línea, la agencia Fitch Ratings ratificó hace poco las calificaciones crediticias local e internacional de Empresas Copec, con niveles de AA y BBB, respectivamente.
Sucuriú representa una oportunidad única para aumentar en forma significativa la escala de la Compañía: una planta de un tamaño que implica altas eficiencias, con uno de los costos de construcción unitarios más bajos de la industria, ubicada en una región de Brasil con ventajas forestales y logísticas excepcionales. Es un proyecto que conjuga una importante generación de valor económico con beneficios ambientales y sociales, alineado con la visión de largo plazo de Empresas Copec.
Los próximos años estarán marcados por tres focos estratégicos: una ejecución impecable del proyecto, con proveedores y equipos técnicos de primer nivel; una disciplina financiera transversal, que permita acceder a recursos en condiciones óptimas, y una maximización de la rentabilidad de los negocios existentes, para contribuir desde ellos al financiamiento de esta gran inversión.
Así, Empresas Copec continúa avanzando con decisión, prudencia y visión de futuro.